Un buen sistema de control de plagas empieza con una precisa identificación del organismo causante del daño; solo así se puede diseñar un tratamiento adecuado. Como resultado de una identificación errónea, a parte de los problemas comerciales que pueden aparecer, pueden encontrarse otras dificultades, como las que están relacionadas con la sanidad, la seguridad y las normativas vigentes.
Una de las partes esenciales del servicio consiste en ofrecer información relevante que ayude a los técnicos de control de plagas a localizar los focos de infestación y a escoger el método de control más adecuado para cada situación. La información que se adjunta con la identificación está planteada desde la concepción del control integrado, de forma que se ofrece asesoramiento de medidas de control tanto físicas como químicas. El informe de identificación se acompaña con imágenes e información precisa de las medidas a tomar en cada situación concreta.